5 alicientes y 5 consejos para convertirte en buen runner

Correr está de moda. Es un hecho. Mira a tu alrededor y te darás cuenta de la cantidad de gente con ropa chillona y fosforita que hay por las tardes y noches por las calles y parques de nuestras ciudades (por no hablar del Retiro). Debo confesar que soy un runner y me siento orgulloso de serlo. El ser un runner me ha enseñado algunas cosas útiles y no sólo me refiero a tener mejores marcas para que aumente mi autoestima, sino también a cosas que mejoran mi vida.

Tal vez eres un runner o quizás no, pero en cualquier caso hay muchas lecciones útiles que se pueden aprender de este deporte, con el fin de tener una vida mejor. Aquí están diez de estas 10 lecciones y consejos que puedes experimentar:

1) Para iniciarte no necesitas nada…bueno sólo unas zapatillas

Bueno, sólo necesitas unas zapatillas; unas zapatillas normales y corrientes y si te picas, puedes comprarte unas con cámara de gel o aire. Por ejemplo, unas Asics.

2) Lo mejor es al final, cuando terminas

En una carrera larga, digamos de unos 10 km, hay gente que empieza quizás demasiado rápido sin ser conscientes de que lo suyo es conseguir la meta que te has propuesto. No te rindas a la primera, lo importante es cumplir el objetivo que te has marcado (tiempo o distancia), no la marca. ¿Cómo medirlo? El último grito son las pulseras de actividad.
Para esto, piensa en algún aliciente que te tendrás cuando cumplas el objetivo…por ejemplo tomarte una cañita :-). Hay grupos en facebook (Beer Runner Madrid) que quedan y lo celebran así.

3) Escucha a tu cuerpo

¿Eres de esas personas que crees que puedes con todo? Ve despacio, poco a poco. Si te pasas de la raya es posible que acabes con dolor de espalda o que te duela la cabeza. Los runners siempre escuchan a su cuerpo y a la más mínima señal, paran. Hazlo antes de que te lesiones.

4) Háblale a tu cuerpo

¿Le has pedido alguna vez a tus caderas que muevan tus piernas cuando te sientes agotado? Este es uno de los secretos que tienes que aprender para convertirte en un gran runner…háblale a tu cuerpo.
Una vez que le explicas por qué corres y cual es tu aliciente, quizás tu cuerpo acepte un poco más de esfuerzo. Es un diálogo entre tú y tu cuerpo, en el cual tu mente intenta convencer a tu físico y físico a tu mente. Tal vez te des cuenta de que tu cuerpo está más cualificado de lo que pensabas y puedes alcanzar esa meta que parecía muy lejana.

5) Celebra tus avances

Tanto el running como la vida en general son muy exigentes así que no nos metamos presión. ¿Has corrido un par de kilómetros? Pues fenomenal! Disfruta del hecho de haberlos hecho. Ponte otra meta para la próxima vez y listo. Si en lo único que te fijas es en cuantos km has hecho y no saboreas tus pequeñas victorias, dificilmente podrás avanzar.

6) Mantente alejado de las adicciones

Estoy hablando tanto de sustancias legales como de ilegales. Pasa de ellas. Sólo tienes que ser adicto a una cosa…correr. Los runners nos sentimos bien mientras corremos y eso es lo que nos hace querer correr más y más. Para mi la vida es algo más, por ejemplo no ir a correr. Eres un “runaholic”, un “workaholic”…? Si lo eres, piensa en esto…en el término medio está la virtud.

7) Te lo puedes pasar bien yendo tú solo o en grupo

Estás tú y el recorrido que hayas elegido. Es uno de los mejores momentos del día. Y es cuando mejor y más buenas ideas se me ocurren. Me despeja la mente y se nota.

Y claro, también puedes correr en grupo. Te puede venir bien porque quien corre contigo puede animarte y picarte, y por qué no, al revés. Correr en grupo supone (lo he comprado) que mejoren mis marcas.

8) No se trata de que te piques con todo y contra todos

No se trata de que tengas que mejorar tu marca continuamente, no se trata de que seas más rápido que tus amigos. No eres tú contra el mundo. Correr es todo lo contrario: sé consciente de tus habilidades y aptitudes, ponlas en práctica y ya llegarán los resultados. ¿Vas a ir a correr? Pues disfruta.

Haz tuyo el lema olímpico: “Citius, Altius, Fortius” (más rápido, más alto, más fuerte) y dirige tu carrera. Celebra tus logros y tus recaídas (por qué no?), porque esa es una señal de que eres un verdadero ser humano, no una máquina de correr.

9) Ponerse objetivos hace que mejores

Hablamos de que correr por el gusto de correr es lo principal. Pero ponerse unos objetivos es también una buena cosa. Tener en cuenta que una meta debe ser lo suficientemente inteligente (es decir, simple, medible, alcanzable, realista y de tiempo limitada) para que sea eficaz.

Terminar una maratón después de un plan de dieciséis semanas podría ser una meta, sin embargo no lo es para ser el mejor corredor del mundo. Y, por supuesto, no olvides hacer tus objetivos públicos (hay muchas apps y webs), para que todo el mundo pueda verlos. Y no caigas en el error de hacer caso a los pesimistas de turno o a los aguafiestas.

10) La imagen es lo último

Tanto si eres o no una “fashion victim” lo más importante es que compres una zapatillas funcionales, estas son sólo un ejemplo…Nike, Adidas o Mizuno (pincha en ellas).
Pruébate al menos 4 o 5 pares y después elige las que más cómodo te hagan sentir. Una vez que lo tengas claro, mira la posibilidad de los colores que tienen y demás.

Una carrera no es un desfile de modelos (aunque en mi gym lo parece 🙂 ) y ten cuidado porque hasta una mala camiseta puede ser incómoda a la hora de correr, así que recuerda que las preguntas clave que tienes que hacerle al vendedor de turno. Con esto tampoco quiero decir que paso de la imagen completamente (sería mentir) e igualmente digo que me gusta ver a mi novia con una ropa chula pero insisto, lo primero es ropa funcional.

Estas son 10 ideas con las que he pretendido estimularte o aclarar alguna cosa con el simple objetivo de te tengas una vida más saludable.

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