19 cosas en común de la gente con carácter positivo (1ª parte)

La felicidad se tiene porque es una elección y también se contagia y se recibe. Y esto empieza con tener una actitud positiva en la vida. Vivir con alegría y ser positivo es una actitud.

Lo que quizás no sepas es que estas personas no han tenido un camino de rosas. Y esa es una de las claves.
Lo que la gente común no es consciente es que la gente alegre también se enfrenta a problemas cada día. La vida no es de color de rosas para ninguno pero hay gente que sabe como hacerlo para ver las cosas dentro de un todo y saber sacar la lección positiva a lo malo.
Si te preguntas por qué determinada gente parece feliz en todo momento, aquí tienes algunos secretos.

1.- No han tenido una vida fácil

Luchar es el verdadero significado de la felicidad. Nadie que es realmente feliz te puede decir que lo tuvo fácil. Se levantaron una y otra vez a base de fuerza y entusiasmo. Y lo hicieron así porque es lo que les enseñaron. Si al mal tiempo eres capaz de ponerle buen cara, estás ganando la partida. Y, ¿quien no se puede sentir bien así?

2.- No siempre están bien

Seamos realistas, nadie está de buen rollo siempre y con razón. La gente verdaderamente feliz entiende lo que a veces es normal, sentirse triste. Tratar de forzar ser una persona alegre es absurdo. Así que aceptan la tristeza, las lágrimas y los obstáculos como algo natural que forma parte de la vida. Son personas al fin y al cabo.

3.- Adoran sus defectos

Para ellos, ser perfectamente imperfectos, es lo perfecto. Han llegado a un acuerdo con lo que son y han aceptado sus defectos, todos sus defectos. Saben que esto es una parte del todo que los hace especiales y les gusta. Entienden que no existe la perfección y no sólo la han dejado de perseguir sino que descubren que las imperfecciones son geniales.

4.- Saben decir no

Decir “no”, no es fácil para mucha gente. Especialmente si eres de ese tipo de personas que le gusta hacer felices a otros. Sin embargo, las personas realmente felices no hacen eso, no siempre se puede dar prioridad a los demás. Esto es algo que a la larga crea de una forma segura estrés y ansiedad. Lo hacen de tal forma que no supone un tema embarazoso ni para la amistad con otros ni para ti mismo.

5.- Saben lo que es estar abajo

Han estado más veces abajo que arriba. Ni siquiera saben cuantas veces han estado abajo y han tenido que trabajar lo indecible para volver a estar arriba. Para muchos, estar abajo después de haber alcanzo el éxito sería la señal final, pero para las personas realmente felices, es sólo para oportunidad de empezar de nuevo; para construir una base mejor y más fuerte.
Aprendieron mucho por el camino, y han aprendido mucho más en el camino de vuelta hacia abajo. Acumulan esa experiencia y así tiran de nuevo hacia adelante con más seguridad.

6.- Evitan el estrés innecesario

Ya sea a través de la meditación o por otro medio, la gente realmente feliz sabe evitar a su manera situaciones de estrés innecesarias, y salen de ahí lo más rápidamente posible. Esto es ninguna manera de evasión, sino una estrategia que les permite concentrarse en las cosas que realmente importan, y no dejan que las pequeñas cosas que pueden convertirse en algo grande puedan estresarles.

7.- Hacen ejercicio

¿Qué te puede hacer más feliz que algo que generas tu mismo desde dentro? Les gusta la vida sana y el ejercicio y no sólo para lucir “palmito”, sino porque les hace sentir realmente bien. Ya sea correr al aire libre, jugar un partido de padel o ir al gimnasio. Las personas felices saben del poder de las endorfinas.

8.- No supeditan su autoestima a las modas

No necesitan tener lo último o lo mejor. Saben que las cosas no tienen la llave de la felicidad aunque ayudan. En las relaciones, tienen claro que las otras personas tienen que aceptarles tal y como son.
Es posible que hayan sufrido peleas internas con su autoestima en el pasado, persiguiendo cosas que pensaban que les harían mejores pero ahora saben que son perfectos tales y como son.

9.- No juzgan a las personas

No tienen ninguna necesidad o simplemente no quieren juzgar a los demás porque no les gusta que le juzguen a ellos. Son de la filosofía de “vive y dejar vivir”. Ni les va ni les viene lo que otros están haciendo o no hacen.

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El sábado que viene, la segunda parte.