Una ducha ya no es sólo una ducha… La gente suele ducharse por diversos motivos, desde relajarse y animarse hasta simplemente quitarse el sudor y la suciedad después de un largo día de trabajo. Pero el momento de la ducha es importante para la salud, y aunque la gente está dividida entre “ducharse por la noche” y “ducharse por la mañana”, hay pruebas bastante sólidas de que ducharse al principio del día es mejor para la salud. Echemos un vistazo a ocho señales distintas que sugieren que deberías ducharte por la mañana.
1. Manos y pies fríos
El frío (o entumecimiento) en las manos o los pies puede ser un signo de mala circulación. Pero no son sólo las manos y los pies los que sufren: la circulación lenta de la sangre puede causar toda una serie de problemas, desde problemas cardíacos hasta la cicatrización lenta de heridas tras un accidente. Una ducha matutina, sobre todo fría, puede ayudar a solucionar este problema, ya que hace que la sangre se precipite a la superficie de la piel, ayudando a mejorar el flujo sanguíneo en general.
2. Ansiedad y preocupación
Los signos que se deben buscar no son sólo físicos, también hay síntomas emocionales que pueden tratarse duchándose por la mañana. La ansiedad y la preocupación por el trabajo, las relaciones o el dinero pueden pasar factura a nuestra salud a largo plazo. Afortunadamente, hay pequeños cambios en el estilo de vida, como ducharse por la mañana, que pueden ayudar a aliviar estos temas de forma natural. Esto se debe a que el aumento del flujo de sangre al cerebro ayuda a la función general de las neuronas, y también parece tener un efecto protector contra el estrés.
3. Fatiga
Si te cuesta arrancar por la mañana, no importa lo mucho que hayas dormido la noche anterior, esta es otra señal de que una ducha matutina es adecuada para ti. Los estudios han demostrado que ducharse con agua fría a primera hora del día ayuda a reforzar el sistema nervioso central y a estimular las glándulas suprarrenales, lo que se traduce en mayores niveles de energía y más ánimo para empezar el día.
4. Infecciones frecuentes
Si parece que coges todos los resfriados, toses y mocos que hay aunque te laves las manos constantemente y vivas de la vitamina C, deberías considerar ducharte por la mañana. Los estudios han demostrado que esto en realidad puede ayudar a su cuerpo a producir más glóbulos blancos, que son vitales para su sistema inmunológico, y ayudan a combatir las bacterias, virus y otros microorganismos que causan enfermedades o dolencias.
5. Acné y piel o cuero cabelludo graso
Si padeces acné y tienes la piel o el cuero cabelludo grasos, este problema suele empeorar un poco por la mañana. Sin embargo, las duchas frías por la mañana ayudan a equilibrar y regular los aceites naturales de la piel, y ayudan a reducir el exceso de grasa, y problemas como el acné, que pueden empeorarlo. ¡Es un consejo de belleza ridículamente fácil de llevar a cabo!
6. Congestión nasal y torácica
Las alergias o una infección vírica como un resfriado o la gripe pueden dejarte con una miserable sensación de congestión por la mañana, ya que la mucosidad tiende a acumularse por la noche y provoca dolor y molestias al día siguiente. Sin embargo, el vapor de una ducha caliente tomada a primera hora de la mañana puede ayudar a solucionar este problema de forma natural. El vapor es genial para aflojar la mucosidad acumulada, que de otro modo causa molestias al respirar de forma natural.
7. Baja fertilidad
Si eres un hombre que quieres tener un hijo y necesitas consejos para hacer más fácil el concebirlo, también debe considerar una ducha fría por la mañana. Las investigaciones han descubierto que las duchas frías pueden ayudar no sólo a elevar los niveles de testosterona, sino también a aumentar la producción de espermatozoides, dándote más posibilidades de poder formar una familia.
8. Acumulación de tóxicos
Las personas están expuestas a un buen número de variedad de toxinas a través de los alimentos que comen, el agua que beben, los medicamentos, y simplemente en el aire que respiran cada día de sus vidas. Sin embargo, hay formas cotidianas de ayudar a reducir la posibilidad de que estas sustancias no deseadas se acumulen en su sistema, y la ducha fría por la mañana es un buen remedio. Las duchas frías no sólo ayudan a estimular la sangre, sino que también estimulan el flujo de fluidos linfáticos que ayudan a limpiar el cuerpo de toxinas y a mantenerlo sano.
Así que haz el esfuerzo de levantarte quince minutos antes y métete en la ducha. Es una forma estupenda de empezar el día y, además de hacer que te sientas mejor, te ofrece una serie de beneficios para la salud.