Blog de hábitos saludables Hábitos saludables para mejorar tu vida
Los niños de hogares divorciados pasan por ciertas luchas que sólo ellos pueden entender. Han experimentado lo duro que es ver como las dos personas que ellos más quieren se separan cuando necesitan obtener lo mejor de cada uno de ellos.
Estas son algunas de las cosas que se guardan para ellos y que nunca se las dirán a nadie.
1.- Tienen un mecanismo de protección muy alto
Ya han pasado por ahí. No quieren experimentar de nuevo como la gente se va. Quieren estar seguros. Quieren estar a salvo. Quieren protegerse de la gente que les puede volver a dejar tirados. Los mayores pueden rehacer su vida mientras que ellos siguen ahí.
2.- Tienen apego a sus cosas
Los juguetes, sus cosas…es lo único que tienen seguro. No les gusta desprenderse de ellas. Es su distracción, su evasión y las quieren a su lado.
3.- Tendrán un favorito, su padre o su madre
Por mucho que no quieran, siempre se sienten más identificado con uno de los dos. Es natural. Si eres el padre menos querido, no le culpes, no te líes. Tu mujer no está poniendo a tu hijo en contra tuya. Haz las cosas bien y punto. Y da tiempo al tiempo.
4.- Cuando se hacen mayores, tienen miedo al compromiso
No quieren que lo que sucedió con sus padres se repita con ellos. Esto les crea inseguridad. Les hace dar una imagen de lo que no son. Pero al final, el compromiso les maravilla y están dispuestos a darlo todo.
5.- No les gustan los mentirosillos
Si sus padres se estaban engañando el uno al otro, está claro que esto causó su divorcio. Quieren gente con valores, comprometida y que lleve la relación con responsabilidad.
6.- Son demasiado críticos
Hacen demasiadas preguntas. Creen que es difícil confiar en los demás y dudan de la fidelidad de las personas. Le dan importancia a cosas con menos significado y más a cosas que no las tienen. No interpretan siempre bien las cosas.
7.- Valoran muy mucho la comunicación
Han visto como la falta de comunicación entre sus padres ha sido uno de los causantes de su divorcio. Les gusta estar involucrados en los planes familiares. Ser partícipes de ellos. El hecho de contar con ellos les hace sentirse queridos y lo valoran.
8.- Adoran a sus hermanos
Nadie como ellos saben como se sienten. Nadie como ellos han vivido lo que ellos han vivido. Saben que el mejor apoyo está en ellos. Tendrán sus más y sus menos pero son su fuente de dasahogo y sus confidentes.
9.- Les gusta sentirse queridos
No han tenido el equilibrio de afecto de ambas partes. Lo fue de un modo desarticulado. Quieren algo total y completo, igual que los otros niños. Como esto no es posible, buscan a alguien que realmente les cuide y les llene.
10.- Son más conscientes de los puntos flacos del otro
Cuando se hacen mayores se hacen más preguntas sobre la que puede ser su pareja. ¿Es soberbia/o? ¿Entiende lo que es ceder? ¿Valora el esfuerzo? Antes de comenzar cualquier relación, quieren estar seguros de quien tienen a su lado.
¿Te ha gustado este artículo? Pues compártelo por favor en facebook. Gracias!
