Propiedades e indicaciones terapéuticas: Cola de caballo, semillas de calabaza, camilina, carbón vegetal, cardo maría, crisalina, cromo, diente de león…
- Aceite de semillas de Calabaza (Cucurbita pepo L.): el amigo de la próstata.
El aceite de las semillas de calabaza posee un alto contenido en prótidos ricos a su vez en aminoácidos esenciales (hasta un 35%). Sin embargo, su importancia en dietética se debe especialmente a la presencia de un componente, la cucurbitacina, de interesantes propiedades a nivel prostático. Estudiada de forma aislada, la cucurbitacina podría intervenir en el bloqueo de la división de las células glandulares (acción antimitótica) ejerciendo un efecto antiinflamatorio. Gracias a esta propiedad, también podría ser utilizado en el tratamiento de la inflamación de la vejiga.
- Camilina (Camellia thea Link): quemar las grasas.
El té no es solo una deliciosa bebida conocida en el mundo entero, sino además una plana medicinal de gran interés. Para esto hay que conservar las hojas jóvenes y evitar su fermentación, pues aunque ésta le de al té su color y sabor característicos en el momento de la infusión, destruye una gran parte de las sustancias activas. El polvo total de té verde criomolido tiene garantizado su contenido en principios activos. Está indicado en los regímenes de control de peso por ejercer una doble función. Por una parte, estimula y prolonga la vida de una hormona, la adrenalina, cuya acción en el organismo consiste en sacar las grasas de las células y quemarlas. Por otra parte, acompleja las enzimas digestivas a nivel del intestino, disminuyendo así la asimilación de ciertos nutrientes, principalmente, azúcares y grasas.
Indicaciones terapéuticas:
- Diurético y lipolítico.
- Limita la absorción de azúcares y grasas.
- Coadyuvante en regímenes de control de peso.
- Carbón Vegetal : el gran absorbente natural.
El carbón vegetal activo se obtiene mediante la carbonización de la cáscara de coco. En la actualidad, es el absorbente natural más poderoso. Tiene la capacidad de absorber, es decir, de fijar sobre su superficie, ciertas sustancias como bacterias, toxinas y gases. Es, por tanto, muy eficaz en el tratamiento de problemas funcionales del sistema digestivo como pueden ser los dolores abdominales, las dificultades en el tránsito intestinal y la inflamación de vientre. El carbón vegetal activo suprime rápida y eficazmente la aerofagia, los eructos y los desagradables gases intestinales. Asimismo, el carbón hace desaparecer el mal aliento, originado generalmente por una fermentación intestinal demasiado fuerte. También es muy útil en el tratamiento de las diarreas, ya que absorbe las bacterias presentes en el intestino.
Indicaciones terapéuticas:
- Tratamiento de las diarreas.
- Glases, flatulencias.
- Mal aliento.
- Cardo María (Silybum marianum Gaertn.): la planta del hígado.
Su nombre proviene de una leyenda medieval. Queriendo la Virgen María esconder a su hijo Jesus de los soldados de Herodes, lo ocultó bajo las hojas de un cardo. Sin embargo, en su precipitado huida dejó algunas gotas de leche sobre sus hojas, dando lugar a su jaspeado. Se ha demostrado científicamente que su efecto sobre los trastornos hepáticos se debe a un principio activo llamado silimarina. Ésta actúa directamente sobre las células del hígado, regenerándolas y combatiendo las sustancias hepatotóxicas (alcohol y otros tóxicos de origen alimentario). Favorece la secreción de la vesícula biliar, por lo que se recomienda en caso de insuficiencia hepática o de cálculos biliares. También ejerce una acción hemostática interesante en caso de sangrado frecuente de nariz y de reglas abundantes.
Indicaciones terapéuticas:
- Trastornos hepáticos: desintoxicante (hepatitis, ictericia).
- Hepatoprotector (cirrosis, alcoholismo).
- Sangrado de nariz y hemorragias.
- Cáscara Sagrada (Rhamnus purshiana D.C.): contra el estreñimiento ocasional.
La cáscara sagrada pertenece a la familia de las rhamnáceas, plantas con principios activos de propiedades laxantes. Es ideal para el tratamiento del estreñimiento ocasional (debido a cambios de hábito alimentario, viajes, alteraciones emocionales, medicación…). Además de estimular el tránsito, favorece las secreciones intestinales consiguiendo una evacuación más fácil. No debe ser utilizada en niños menores de doce años y el tratamiento, en caso de adultos, no debe exceder de ocho días. Una vez normalizada la actividad del intestino, es necesario prevenir la reaparición del estriñimiento. Para ello, una de las plantas más conocidas y recomendadas por su contenido en mucílago es el Plantago ovata (Mucivital).
Indicaciones terapéuticas:
- Estreñimiento ocasional.
- Situaciones en las que sea necesario una evacuación fácil: operaciones rectorales, fisuras, hemorroides….
- Castaño de Indias (Aesculus hippocastanum L.): la planta de las varices.
Contrariamente a lo que nos sugiere su nombre, el castaño de Indias es originario de los Balcanes. En medicina se utiliza sólo la corteza, ya que a diferencia del fruto, carece de efectos secundarios. Esta planta debe su gran interés terapéutico a su contenido en derivados cumarínicos, responsables de su importante acción vitamínica P. Sabemos que esta acción vitamínica P es múltiple: aumenta la resistencia de los capilares, disminuye su permeabilidad y tiene un efecto antiinflamatorio y antiedematoso. Todas estas propiedades hacen que el polvo de corteza de castaño de Indias, acondicionado en forma de cápsulas, constituya un tratamiento práctico y muy eficaz de los problemas circulatorios y, en particular, de las varices y hemorroides.
Indicaciones terapéuticas:
- Varices, absorción de edemas (piernas hinchadas).
- Insuficiencia venosa y hemorroides.
- Fragilidad capilar cutánea (cuperosis).
- Calambres musculares nocturnos.
- Cola de caballo (Equisetum arvense L.)
La cola de caballo es una planta sin flores que crece en los lugares húmedos. Su aspecto hace que sea así denominada. Es muy rica en minerales, potasio y principalmente sílice. Es un remineralizante muy útil en los casos de fatiga, fracturas o en el embarazo. Es además diurética, por lo que se emplea para estimular las funciones renales. La sílice y algunos minerales estimulan el tejido conjuntivo, facilitando la construcción del cartílago en el curso de las enfermedades articulares. En este caso, debe asociarse al harpagofito (Harpadol). También actua sobre la flexibilidad de los tendones y de las paredes vasculares. Es un notable producto para los deportistas que someten sus tendones a duras pruebas: tenistas, ciclistas, corredores, futbolistas… La cola de caballo es la gran planta medicinal reconstituyente de los deportistas.
Indicaciones terapéuticas:
- Remineralización ósea.
- Cabellos y uñas quebradizos.
- Tendinitis y dolores articulares (reconstrucción de los cartílagos).
- Crisalina (Chrysanthellum indicum. Subespecie Afroamericanum B.L.): la planta de las hemorroides.
Esta pequeña planta salvaje de las sabanas de África y de las regiones montañosas de Sudamérica se ha introducido recientemente en las farmacopeas europeas. Este es el motivo de que aún conserve su nombre latino y no haya sido baurizada por la tradición popular, como la mayoría de las planta medicinales. El chrysanthellum americanum posee flavonoides y saponinas. Estas dos clases de componentes actúan de manera complementaria y confieren a esta planta dos acciones esenciales que explican su gran éxito en la fitoterapia moderna: una importante acción vitamínica P (fortalece el tono venoso y hace disminuir la permeabilidad de los capilares) y una acción hepatoprotectora y colerética (favorece la secreción biliar).
Indicaciones terapéuticas:
- Hemorroides, varices, piernas cansadas.
- Cardenales y petequias.
- Cálculos biliares y renales.
- Cromo : regula el metabolismo.
El cromo es un mineral que está ausente en los alimentos de origen marino. Por el contrario, se encuentra abundantemente en los productos procedentes de la tierra como la fruta, las verduras, los productos lácteos, las carnes, y en un menor grado, la cerbeza y el vino. Ahora bien, los aportes realizados a través de estos productos varían según la riqueza de las tierras de cultivo y las técnicas agrícolas empleadas. Al tratarse de un oligoelemento, su presencia es indispensable para el organismo pues regula el metabolismo de los azúcares y actúa sobre el control de la absorción de glúcidos y de la secreción de insulina favoreciendo el paso de los glúcidos al interior de las células. En caso de dietas deficitarias, especialmente en edades avanzadas, pueden realizarse aportes complementarios para compensar las carencias alimentarias.
- Diente de león (Taraxacum dens leonis Dest.): el gran depurativo.
El diente de león es una planta muy extendida en toda Europa. Debe su nombre a la característica forma de sus hojas que, por otra parte, pueden comerse en ensalada. La raíz del diente de león estimula la secreción de los órganos de la digestión, por lo que se utiliza en caso de hipoacidez gástrica y en los trastornos digestivos en general, como son los casos de hígado perezoso, estreñimiento, etc. Se ha demostrado científicamente que aumenta de 2 a 4 veces la secreción de bilis. También se ha destacado su beneficiosa acción sobre los cálculos renales por su acción diurética y laxante. Debido a estas acciones se utiliza en las dietas de control de peso. Como dato curioso, debemos saber que su raíz torrefacta da un excelente sucedáneo del café beneficioso para la salud (el diente de león es de la misma familia que la achicoria).
Indicaciones terapéuticas:
- Cálculos de la vesícula biliar.
- Facilita las funciones de eliminación renales y digestivas (estreñimiento y dietas de control de peso)