15 señales de la gente que es absorbente

A nadie le gustan las personas absorbentes, al menos a la mayoría de la gente que yo conozco. Las personas absorbentes muestran ciertos patrones similares a los de las personas narcisistas, y acercarse a ellas puede dañar tu autoestima.

Sin embargo, darse cuenta de ciertos elementos que definen su carácter puede hacer que estemos más preparados para tratar con ellos.

Aquí tienes 15 señales de personas absorbentes:

1. Siempre están a la defensiva.

No ven el mundo desde los ojos de otra persona. Prefieren verlo desde los suyos y proteger sus defectos e imagen con todo lo que tienen.

2. No ven el panorama completo.

Una persona absorbente piensa que el mundo sólo gira en torno a ella. Así, el mundo, desde su punto de vista, es un lugar que les comprende a ellos y quizá a unas pocas personas de su entorno a las que pueden controlar. Cómo afecta el mundo a otras personas realmente no les concierne.

3. Son impositivos.

Utilizan con frecuencia palabras como “debería” o “debo”. Quieren dominar en cualquier relación porque ven las relaciones como una herramienta para conseguir lo que quieren y convertirse en el centro de atención.

4. A veces se sienten inseguros.

No están completos. Siempre les falta algo en su mundo. Y tú puedes ser la persona a la que intentan utilizar para llenar esos huecos.

5. Siempre se creen superiores a los demás.

Están tan consumidos por su propio mundo y su propia imagen que es casi imposible que otras personas estén a su altura. Mantienen un complejo de superioridad que lo más común es que les lleve a devaluar a los demás.

6. Consideran las amistades como una herramienta para conseguir lo que quieren.

No des por sentado que les preocupa demasiado la amistad que tienen contigo. Por eso tienen tantos amigos y no se preocupan en exceso por el número de amigos que tienen: consideran a los amigos como herramientas para conseguir lo que quieren.

7. Son extremadamente obstinados.

Siempre se trata de sus opiniones. No quieren tener en cuenta las opiniones de los demás; debido a su ensimismamiento están consumidos por su propio punto de vista, imagen de sí mismos, deseos y preferencias.

8. No tienen relaciones duraderas.

Dado que sus relaciones se construyen en torno a la idea de cantidad y utilizando a las personas como herramientas para conseguir lo que quieren, no tienen relaciones duraderas ni de calidad.

9. No tienen un verdadero sentido de la empatía.

Dado que su muestra de simpatía o compasión suele ser condicional, les resulta difícil comprender la profundidad de la verdadera empatía o lo que realmente significa este concepto.

10. Esconden sus inseguridades tras un manto de éxito.

La verdad es que no importa el tipo de éxito que tengan, siempre se sentirán inadecuados internamente. Aunque puedan parecer exitosos o seguros de sí mismos basándose en las apariencias y los logros externos, internamente tienen miedos relacionados con la autoestima.

11. Devalúan a los demás.

La crítica constructiva está bien, pero las personas ensimismadas siempre llevan la crítica demasiado lejos y la utilizan como un arma que les permite devaluar a los demás.

12. Pueden ser arrogantes.

Esto se debe a que se sienten muy importantes y mejores que los demás. Una persona absorbente a menudo puede ser egoísta.

13. Ocultan quiénes son.

Te presentarán la parte mejor y más cautivadora de su personalidad. Como están tan ensimismados, no quieren que veas los elementos ocultos que les hacen sentirse secretamente inseguros. Esto puede llevarles a parecer pretenciosos y a no ser vulnerables en las relaciones.

14. Son extremadamente egoístas.

Todo ser humano es egoísta. Pero hay ciertas ocasiones en las que hay que hacer excepciones y emprender acciones sin esperar nada a cambio. Esto no es así para la persona egocéntrica.

15. Creen que son geniales y que el mundo está equivocado.

No se curan a sí mismos. Si han sido heridos, prefieren reprender al mundo por ello en lugar de curarse a sí mismos.

Para la personas absorbentes, el problema eres tú o el otro, nunca yo. La mayoría de las veces, parecerá que ninguna forma de autocuración o terapia les conviene, ya que se centran en todos los males que el mundo les ha hecho, sin aceptar nunca ninguna responsabilidad.

Cuando reconozcas los signos anteriores, piensa que puedes estar tratando con una persona absorbente o que tú mismo puedes ser uno de ellos.