Cualquiera que haya mantenido una relación duradera sabe que la chispa puede apagarse. Es perfectamente normal; al fin y al cabo, no es muy realista creernos que todo va a ser tan emocionante como al principio. Pero no debemos de caer en la trampa de que pasarlo bien juntos y la chispa deban desaparecer por completo. Aquí tienes algunos consejos y trucos para mantener vivo el romanticismo en tu relación.
1. Comparte tus recuerdos
No dejes nunca de recordar los momentos maravillosos que habéis pasado juntos. Cuéntale a tu pareja lo mucho que significan para ti ciertos acontecimientos y el tiempo que pasaste con ella. No caigas en la trampa de vivir en el pasado. Debes querer crear nuevos recuerdos y no quedarte estancado en el pasado.
2. Recrea tu primera cita
Espero que lo hagas por diversión y no porque tengas amnesia o algo así.
Una bonita forma de darle chispa a tu relación es recrear un momento en el que todo era nuevo y emocionante. A menos que tu primera cita fuera un desastre absoluto, ¿por qué no recrearla para tu pareja? Pero no lo fuerces. No pasa nada si las cosas no salen 100% según lo planeado. Quieres que sea una noche divertida de recuerdos, no un desastre.
3. Nunca dejes de seducirle
Una de las partes más excitantes antes de empezar una relación, o hacia el principio, es la seducción. El hecho de que os conozcáis mejor no significa que debáis dejar que eso muera. Sigue haciendo comentarios sugerentes y enviando mensajes de texto coquetos. Si amas a esa persona, deberías querer seguir haciéndole sentir especial.
4. Ir a una segunda luna de miel
O si no estás casado, al menos tómate el tiempo de irte de vacaciones sexy con tu amor. El día a día puede hacer que el romanticismo desaparezca de nuestras vidas. A veces basta con alejarse y redescubrir la pasión que sentís el uno por el otro.
5. No dejéis de besaros
¿Te acuerdas de los besos? Eso de lo que antes no te cansabas.
Es increíblemente importante que no olvides la importancia de los besos. Y no, un piquito o un beso en la mejilla antes de irte a trabajar no cuenta. Tómate el tiempo y el esfuerzo de plantarle un “beso loco” a tu pareja de vez en cuando. Es una técnica tan sencilla que puede hacer maravillas a la hora de mantener viva la intimidad, además de hacer que el otro se sienta sexy y deseable.
6. Sonríe más a menudo
Mucha gente dice que uno de los rasgos que más le gusta de una pareja es su sonrisa. Entonces, ¿por qué muchos de nosotros dejamos de hacerlo una vez que estamos en medio de una relación a largo plazo? Ten en cuenta que se supone que debes disfrutar de la compañía del otro, y que sonreír es una parte importante de ello.
7. Ríete más a menudo
Como en el caso anterior, reír es esencial para una relación sana. Se supone que tu pareja es tu mejor amiga; si no puedes divertirte y reírte con ella, es que algo va muy mal. Tómate tu tiempo para redescubrir vuestro sentido del humor compartido.
8. Juega a disfrazarte
Es una expresión sana de tu sexualidad y puede ser muy divertido. Si sabes que tu pareja tiene un fetiche, un interés o una manía en particular, complácelo durante una noche. Le encantará y es más que probable que esté dispuesto a hacer lo mismo por ti.
9. Sé sincera
Lo anterior no es posible sin ser sincero con tu pareja. Si hay algo con lo que disfrutas, ya sea dentro o fuera del dormitorio, compártelo con ella. Si no sientes que puedes ser honesto sobre ese tipo de cosas, debes preguntarte por qué.
10. Invierte en tu relación
En nuestro ajetreado mundo moderno puede ser increíblemente fácil dejar de invertir tiempo en tu relación y dejar que caiga en la rutina. Como todo, las relaciones deben cuidarse y fomentarse, sobre todo cuando son duraderas. Piénsalo: una relación que dura años y décadas no permanecerá igual todo el tiempo. Durante ese tiempo pueden cambiar un millón de cosas, incluidas las personas implicadas. Por tanto, es lógico que siempre haya que tomarse tiempo para mantenerla sana, interesante, divertida y cariñosa.