La tarea de darles a comer verdura a los más pequeños de la casa no será una tarea difícil a partir de ahora, ya que tendrás a tu disposición multitud de ideas que con creatividad podrás desempeñar de una manera fácil y muy divertida.
Opta por comprar siempre verduras de temporada y no te prives de introducir en el menú diario todo tipo de alimentos como las zanahorias, los tomates pequeños, los pimientos, los rábanos, la calabaza. Probando nuevas texturas ellos
lo agradecerán y se harán “adictos” a alguna.
Prueba a realizar recetas sencillas que a ellos les pueda encantar como los platos de pasta, las ensaladas con salsas, los medallones empanados, las empanadillas de espinacas y piñones, las hamburguesas y las albóndigas vegetales… Toda una marea de posibilidades que a los más pequeños de tu familia les volverán locos.
En el caso de la lasaña podrás rellenar las finas capas de pasta con julianas o concasse (daditos muy finos) de tomate, pimiento verde, pimiento rojo, judías o espinacas, además de algún taquito de jamón. Luego napa con las salsas (podrás intercalar salsa de tomate con bechamel) y espolvorear con queso rallado bajo en grasas ¡los niños no podrán resistirse!
Las hamburguesas vegetales podrás elaborarlas con puré de legumbres, huevo, arroz y verduras picadas finamente además de agregar hierbas provenzales. Su gusto muy parecido al de una hamburguesa adicional será la tentación de todos los familiares de la casa. Podrás servirlas en pan con kétchup y rodajas frescas de tomate o acompañarlas de ensaladas de verduras crujientes como los rábanos rojos. ¡Una delicia!
